Y es que a través de estas plataformas a los colombianos se les está brindando la oportunidad de encontrar el lugar ideal para vivir en menos tiempo, con menos papeleo y con atención brindada las 24 horas.
Un ejemplo de esto es la plataforma Mubrick, una inmobiliaria que está desafiando el sector tradicional llenando los vacíos de búsqueda que este ha dejado en los usuarios.
“En Mubrick contamos con tecnología y estamos innovando para facilitar la búsqueda de nuestros usuarios. Solo con ingresar a la página web este podrá evidenciar y encontrar diferencias muy marcadas frente a las 14 mil inmobiliarias que hay en Colombia con relación a la atención, la búsqueda y la asesoría”, señaló Roberto Agudelo, CEO de Mubrick.
Este emprendimiento colombiano brinda a los ciudadanos la información que necesitan según su perfil, es decir, si es un propietario o un cliente, y de acuerdo a sus preferencias tanto en sector como en las necesidades familiares.
Por ejemplo, según Agudelo, al ser propietario e ingresar a Mubrick este podrá realizar el avalúo de su inmueble de manera gratuita y en un minuto.
“Contrario a asistir a una inmobiliaria tradicional donde cobran aproximadamente $800.000 y entregan el avalúo en 15 días, al ingresar a Mubrick con solo responder siete preguntas, tendrá un resultado de alta precisión y que le permitirá determinar el precio con el que ofrecerá el inmueble en el mercado”, afirmó Agudelo.
De igual manera, contarán con una ayuda audiovisual que les permitirá ofrecer de una mejor manera sus inmuebles y aprovechar la tecnología para dar mayor acceso a la información a los usuarios.
A la fecha, la compañía ha prestado sus servicios a más de 16.000 compradores, 2.000 propietarios de vivienda usada y siete constructoras en menos de tres años. Adicional, han generado más de 200 transacciones inmobiliarias en las tres ciudades donde operan Bogotá, Medellín y Bucaramanga.
Atención al cliente, la prioridad
Según Agudelo, la atención al cliente en el sector inmobiliario tradicional se ha descuidado a tal punto que un cliente puede desanimarse al momento de no recibir respuesta de una llamada o de programar una cita en un horario en el que este no puede asistir.
“Nosotros atendemos las llamadas de la gente entendiendo que el sector tradicional se descuidó mucho en ese sentido. Si un ciudadano llama a avisos de ventana o los que dan las inmobiliarias, es muy probable que no contesten el teléfono. Hicimos la investigación y de diez llamadas contestaron tres y eso es realmente frustrante para el cliente”, señaló Agudelo.
Ante este panorama, la inmobiliaria ha puesto a disposición un grupo de empleados que se encargan decontestar los requerimientos de los usuarios así como brindar asesoría sobre los inmuebles consultados y cuál es el más conveniente según su perfil.
“Nosotros nos preocupamos por saber por qué tres habitaciones, cómo es la composición familiar, hay un adolescente, al esposo le gusta salir a trotar. Todos estos detalles nos permiten identificar lo que necesita el cliente con el fin de optimizar la búsqueda de lo que vamos a mostrar. Enseñamos lo que es y no saturamos con opciones que no se ajustan al perfil”, afirmó Agudelo.
